Reflexiones en lo Abstracto
Escrito por: Eduardo Iberico.
He aprendido mucho de la vida, sobre todo de la soledad, la soledad es el mejor remedio para la enfermedad y para darte cuenta de lo que estas hecho. La soledad te empuja hacia el vacío, lo profundo, te deja a un lado, con hambre y frío. He desperdiciado dos años de mi vida, buscando algo que nunca encontré, deseando ser alguien que jamás fui, porque las cosas se ganan luchando y yo dejé de pelear, anhelando un regreso que nunca llegó.
Me gustaría retroceder el tiempo, al momento que mi sendero se bifurcó, para no sufrir y no llorar; pero estoy dispuesto a salir adelante, no volveré a dar pasos hacia atrás, caminaré hacia adelante y ahora no me detendrán.
Figura 01: Mi alma y cuerpo encontrándose nuevamente.
LA ARQUITECTURA
Quiero dibujar, perderme nuevamente en un trazo, volver a sonreír y dedicar tiempo a escribir, a mis ideas. Debo sacar fuerza de lo más profundo de mi ser para iluminar esta oscuridad. Sueño hacer de este lugar un mundo mejor, quizá yo no escogí la arquitectura, quizá ella me eligió. Hace algún tiempo, después que un destello me rompiera el corazón dije lo siguiente: “La única mujer que nunca me va a dejar de amar será LA ARQUITECTURA, yo la podré abandonar pero ella estará ahí siempre a mi lado, pase lo que pase.
No anhelo deslumbrarme por una doncella, pretendo que ella me contemple y para eso debo de esforzarme día a día, para convertirme en el mejor guerrero de todos los tiempos. Recuerdo que en el 2010, cuando viajé a Estados Unidos, estuve por cuatro meses lejos de los lápices de colores, plumones, de mi libreta y mesa de dibujo; extrañaba estar cerca de mi estudio, trabajando, dibujando y planteándome nuevas ideas.
Deseo reconciliarme con la arquitectura, mi querida princesa, que me ha llenado de buenos momentos y alegrías. Fuiste el motor de mi vida cuando perdí a mi madre a los 17 años, por favor acurrúcame en tu vientre, soy tuyo, moriré contigo, ámame como yo lo hago. Por favor, haz de cada noche intensa y apasionada.
Imagen: Bocetos.
Figura 02: Bocetos.
EL MENSAJE
Finalmente, no te vuelvas loco por el amor y considera lo siguiente: “Los hombre se enamoran por los ojos, somos débiles a la carne y las provocaciones; mientras que las mujeres lo hacen a través del oído, porque la primera impresión no es suficiente, ellas necesitan saber un poco más de ti, de tus batallas y victorias». Así de simple, sin más rodeos, se resume todo.
Figura 02: No te olvides que el sol sale cada día y siempre puedes volver a comenzar.
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